LOS TRES PILARES DE LA SALUD

Cuando hablamos de los tres pilares de la salud nos referimos a tres hábitos que se han visto mermados poco a poco por nuestro día a día, y por un factor muy importante, la falta de tiempo. A día de hoy vivimos en una sociedad carente de tiempo para uno mismo y de estrés. Siendo frases muy escuchadas en consulta las de: “llego tarde a todos lados…” o “es que voy corriendo a todos lados…” Estos tres pilares a los que nos referimos son: el DESCANSO, la ALIMENTACIÓN y el EJERCICIO FÍSICO.

El DESCANSO es vital para la salud. Nuestro cuerpo se recupera mientras dormimos gracias una hormona llamada melatonina. Esta hormona a parte de ayudarnos a conciliar el sueño estimula la producción de hormona del crecimiento (que nos ayuda a formar tejidos nuevos) y la activación del sistema inmune (que nos ayuda a reparar los tejidos lesionados), entre otros. Está claro que, si no descansamos bien por estrés, por trabajo, porque el niño no para de llorar… nuestra recuperación o cualquier proceso de regeneración del cuerpo se verá alterada.

La ALIMENTACIÓN es la base de nuestros tejidos, es decir, nuestras células se componen de moléculas provenientes de los alimentos que ingerimos. Esto nos lleva a pensar que si ingerimos alimentos de mala calidad nuestras células serán de mala calidad. Por otro lado, a parte de que el alimento deba ser bueno, la alimentación debe ser variada, nuestro cuerpo necesita cantidad de vitaminas, bioelementos (magnesio, hierro, potasio, calcio…), entre otras moléculas para todos los procesos vitales, por esa razón necesitamos que los hábitos alimenticios sean variados.

Por último y no menos importante, el EJERCICIO FÍSICO. Es fundamental para regular muchos procesos de nuestro cuerpo. Regula la actuación de nuestro sistema inmunológico, permite regular la concentración de glucosa y colesterol en sangre, mejora la actividad cardíaca, mejora el consumo energético de nuestro cuerpo, mejora la capacidad respiratoria…. Tiene infinidad de beneficios para nuestra salud.

La probabilidad de lesión o de enfermar siempre existe, pero si estos tres hábitos los cumplimos sin excepción la probabilidad será mucho menor que si fallamos en alguno de ellos. Todos trabajamos a destajo para poder jubilarnos y poder pasar tiempo con la familia, hacer algo de ejercicio físico, descansar, pasear, relacionarse con amigos… ¿Por qué no mejor trabajar algo menos y poder hacer todo esto desde hoy?