Andar descalzo es una de las mejores opciones que podemos encontrar para recuperar la alineación de las articulaciones y el espacio anatómico, si bien es cierto que no es lo más adecuado cuando sales de casa, ni tampoco lo más higiénico.
Por ello, y para no hacer sufrir ni al pie, ni a las caderas, incluso a la columna, habría que elegir un buen calzado que cuide de nuestra salud.
Parece ser que los expertos apuntan a que las zapatillas son las que mejor cuidan de nosotros, evitando tanto la fascitis plantar (que provocan las chanclas y las sandalias) como le sesamoiditis (inflamación asociada al complejo del hueso sesamoideo) o la metatarsalgias (inflamación en la bola del pie).
Un excesivo tacón provoca un desajuste en la distribución del peso sobre la planta, mientras que un zapato totalmente plano puede provocar tensión en el talón de Aquiles y que se adopte una mala postura.
Son muchos los dolores y lesiones que nos pueden provocar un par de zapatos mal elegido. Ir la moda no debería conllevar un peaje tan caro. No hablamos sólo de lesiones musculares sino que puede llegar a afectar a nuestros huesos. Una mala pisada nos puede acarrear problemas importantes que nos empujen a visitar a algún traumatólogo.
Como no somos bebés, y el placer de no calzarse queda, quizás, lejos de nuestras posibilidades, habría que estudiar muy bien qué escogemos en la tienda para hacer nuestro camino.
En cualquier caso, si tienes molestias en pies, rodillas, cadera, columna o con tu postura en general, ven a visitarnos y te realizaremos un estudio para poder asesorarte y aportar nuestro granito de arena en pro de su salud.